Madre de la bondad
Madre del amor olvidado
Acógenos con clemencia
Dulce madre del perdón
Intercede a tu hijo que tanto padeció
Ni una mirada de reproche, sólo ternura y amor;
Hacia los linchadores, que lo clavaron en la cruz.
Casi desfallecida, y sosteniendo con su mirada...
Para que no sufriera más, el Hijo de su entraña.
Madre corredentora, Madre sufrida y abnegada.
Eres la más humillada, y serás la mujer más Ensalzada.
Hacia los linchadores, que lo clavaron en la cruz.
Casi desfallecida, y sosteniendo con su mirada...
Para que no sufriera más, el Hijo de su entraña.
Madre corredentora, Madre sufrida y abnegada.
Eres la más humillada, y serás la mujer más Ensalzada.
Intercede en esta hora de la misericordia
Queremos difundirla y practicarla
Para sentirnos hermanos y abandonarnos en tus brazos
Y acompañarte en tu desamparo, en esta hora de la gran misericordia
Dulce misericordia, bella misericordia, hermana misericordia.
Haznos apóstoles de tu divina misericordia
Te lo pedimos Jesucristo por la intercesión de tu bendita madre
Que nos guíe y nos enseñe con su grandiosa humildad
Hasta vernos en el grupo de los que te adoran
Acogidos en la morada de tu Padre Eterno.